Hay quien defiende que una derrota es una derrota y que al final lo que cuenta es si ganas los 3 puntos o no los ganas; pero realmente en el deporte hay tantas maneras de ganar y de perder, que te puedes venir con 3 puntos y la cabeza abajo, o perder pero acabar con una sonrisa en la cara. Porque derrotas como la del sábado duelen, sí, pero menos, mucho menos. Porque si tu equipo da el máximo en cada balón y se esfuerza en todo momento, a sabiendas de que lo probable es caer goleado, te puedes venir de cualquier manera menos triste. Y así pasó. Sí, 13 goles a 4; sí, 0 puntos; sí, contentos y orgullosos.
CD. Cuatro Caminos | 13 | |
Miguel, Ortega, Nacho (1), Enrique, Carlos (4), Pablo (2), Dani; César, Víctor (2), Bermejo, Bravo y David (4) | ||
CW. Valdepeñas | 4 | |
Cifu, Ojeda, Fernández , Cuadra , Ricky (1), Chete (3), Nadis; Manu, Javi, Tate y Álvaro |
Porque la sensación es que jugar contra muchos de estos equipos es darse contra un muro, pero a fuerza de darle con todas nuestras fuerzas, si bien aún no lo hemos derribado, si lo hemos movido unos centímetros, y se van adivinando grietas que nos hacen creer en nuestras posibilidades.
Este sábado nos enfrentábamos al partido más difícil hasta la fecha, y, si bien los nervios ya no nos apresan tanto, el inicio del equipo local fue tan fulminante que al final del 1er cuarto ya se perdía 5-0. Es lo que pasa cuando un equipo viaja en Ferrari, techo descubierto, melena al viento, rubia de copiloto; y el otro equipo intenta pillarlo sesteando las curvas con un Seat Panda, matrícula de Ciudad Real. La intensidad de este cuarto fue tal que nuestra presencia en ataque fue poco más que testimonial y, en defensa, se hizo lo que se pudo.
Pero algo ocurrió, y en lugar de desanimarnos, hicimos piña y nos dedicamos a defender mejor, a atacar más ordenados, y a mirar contra el viento; que sí, que el aire nos hacía daño en los ojos, pero aguantamos. Y llegó un momento en que su boya no llegaba a coger el balón, en que sus pases no parecían tan precisos y en que apenas encontraban fisuras en nuestra defensa. Resultado al final del 2º cuarto, 0-1 a favor de los visitantes. Toma. Grande Álvaro en defensa y muy bien Ojeda en las recuperaciones. Destacar que aguantamos con la portería a 0 ante 5 jugadas en superioridad. Va a ser que sí, que entrenar sirve de algo.
Pero el equipo local cambió el guión del partido y comenzó a mover el balón con mucha precisión, dando además mucha más velocidad a su juego y aprovechando las jugadas en superioridad, ya que nuestra defensa en el interior estaba funcionando muy bien y no dejaba muchas más posibilidades. Al final del cuarto un duro parcial de 6 a 1, pero ni mucho menos bajamos los brazos.
Aprendimos de errores pasados y, a sabiendas de que el cansancio abriría nuevos huecos en su defensa, comenzamos a jugar a más velocidad. Nuestro capitán comenzó a agitar el ataque y a abrir huecos, mientras un omnipresente Ojeda hacía y deshacía por todos lados. Y aunque en este cuarto Chete hizo aumentar nuestro marcador con 2 tantos más, nuestras alegrías en ataque las pagamos con fallos inéditos en este encuentro que permitieron a los locales igualar el cuarto, para llevar el partido al definitivo 13-4.
Buen partido del Waterpolo Valdepeñas, apoyado en el esfuerzo de todos y cada uno de sus jugadores. Destacar a Chete y Ojeda en ataque, y a Álvaro en defensa, así como la gran actuación de Cifu bajo los palos.
Si la semana pasada comentábamos desde el blog que debíamos tener claro donde queremos llegar, esta semana creo que estamos más cerca del camino que todos deseamos tomar.
Y el próximo sábado el CW. La Latina B, tercer clasificado el pasado año. Sabemos que sí, que será difícil, pero… ¿Por qué no?